Los Pueblos Indígenas de Frontera y la Salud en el Contexto del COVID-19: El caso de las comunidades indígenas Ayoreas y Pa’ĩ Tavyterã en frontera con el Brasil

Por Salustiana Caballero.

Artículo publicado en “Saúde Dos Povos Indígenas: una emergencia para além das fronteiras” 2021. Essere nel Mondo.

RESUMEN

Este artículo presenta la situación de la salud y el COVID-19 en comunidades indígenas que se ubican en la frontera con el Brasil. Específicamente aborda la condición de las comunidades del pueblo ayoreo en el departamento de Alto Paraguay y las comunidades del pueblo Pa’ĩ Tavyterã en Amambay. En esta revisión situacional resaltan el aumento de la discriminación hacia las personas indígenas en los servicios de salud con la llegada de la pandemia, la necesidad de un abordaje intercultural para promover medidas de prevención y mejor información sobre el virus en las comunidades indígenas. Así mismo se devela el abandono del Estado para garantizar condiciones que permitan el resguardo y aislamiento para evitar los contagios masivos y muertes entre la población indígena.

Palabras claves: Pueblo indígenas, comunidades indígenas de frontera, comunidades ayoreas, comunidades Pa’ĩ Tavyterã, Covid-19.

Pueblos Indígenas en el Paraguay

En el Paraguay viven 19 pueblos indígenas pertenecientes a cinco grupos lingüísticos: El guaraní (Aché, Avá Guaraní, Pa’ĩ Tavyterã, Guaraní Ñandeva, Guaraní Occidental), Lengua Maskoy (Toba Maskoy, Enlhet Norte, Enxet Sur, Sanapaná, Angaité, Guaná); Mataco Mataguayo (Nivaclé, Maká, Manjui); Zamuco (Ayoreo, Ybytoso, Tomárãho) y Guaicurú (Qom)

La población indígena en el país representa el 2% del total de la población, es decir, alrededor de 117 mil personas, de las cuales el 48% son mujeres y el 45% varones, distribuidos en 711 comunidades según el último censo nacional indígena del 2012.

Estos pueblos viven en comunidades dentro de 14 departamentos y Asunción, se encuentran asentados en los departamentos de Central, Guairá, Caaguazú, Caazapá, Itapúa, Alto Paraná, Canindeyú, San Pedro, Amambay, Boquerón, Presidente Hayes y Alto Paraguay.

Las comunidades indígenas son las más afectadas por la pobreza, la desigualdad y la discriminación: según datos oficiales al 2017, el 66,2% de las personas indígenas se encuentra en situación de pobreza. Esto implica que unas 81.000 personas indígenas viven en situación de pobreza y la otra mitad de ellas está en la pobreza extrema.

Las comunidades indígenas de Paraguay afrontan dificultades como la carencia de acceso al agua potable y al saneamiento básico, la inseguridad alimentaria, la falta de viviendas dignas y el analfabetismo.

Si bien se cuenta con la Ley 5469/15 de salud indígena, que busca garantizar el derecho a la universalidad de la salud, este sigue representando un desafío importante. La escasa cobertura sanitaria en las comunidades deteriora aún más sus condiciones de vida. La poca accesibilidad por causas geográficas, económicas, lingüísticas o culturales a los centros asistenciales favorece la mortalidad ante enfermedades.

La llegada de la pandemia y la cuarentena: Las acciones impulsadas desde el gobierno.

 El confinamiento total por pandemia de COVID-19 en Paraguay inició el 10 de marzo de 2020 y el 20 de marzo se confirmó el primer caso de transmisión comunitaria en el país. A través de un decreto presidencial, el Gobierno Nacional decidió suspender todas las actividades que pudieran representar riesgo de transmisión masiva. A partir del 10 de marzo la sociedad paraguaya ingreso en cuarentena y aislamiento social, incluida las poblaciones indígenas.

En los primeros meses de cuarenta y aislamiento social, el gobierno impulsó algunas acciones para mitigar el impacto de la pandemia en la población indígena. La entidad rectora, el Instituto Paraguayo del Indígena (INDI) y la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) entregaron kits de alimentos no perecederos a las comunidades, esta acción recibió numerosas críticas por parte de las propias comunidades indígenas, ya que algunas no llegaron a recibirla y otras indicaron que estaban en malas condiciones y que la provisión era insuficiente ante la acuciante pobreza.

Por otro lado, con el propósito de reducir los peligros de contagio de las comunidades, el INDI emitió un Protocolo de ingreso a las comunidades indígenas en tiempo de pandemia, en el que se mencionaba las medidas de control, cuidado, y tiempo de permanencia.

Así mismo, la Dirección Nacional de Salud de los Pueblo Indígenas (DINASAPI) junto con la Comisión Nacional de Salud de los Pueblos Indígenas (CONASAPI), emitió una guía y recomendaciones para la prevención protección del Covid-19 dirigido a los pueblos y comunidades del Paraguay. En este documento se exhorta a tomar medidas de cuidado como no saludarse estrechando la manos, no compartir terere, mate, cubiertos, etc.

Por su parte la Comisión Nacional de Conmemoración del Año Internacional de las Lenguas Indígenas, con la colaboración de la Secretaría Técnica de Planificación del Desarrollo Económico y Social (STP), elaboró audios con información de las medidas generales para la prevención del COVID-19 en siete lenguas nativas: Ishir Ybytoso, Enxet, Qom, Nivaclé, Guaraní Occidental, Pai Tavytera y Aché.

Todas estas medidas fueron realizadas en los inicios de la cuarentena, sin embargo, con el correr de los meses y el levantamiento de las medidas de aislamiento y restricciones, las comunidades volvieron a su vida normal como el resto de la población nacional, más aún comprendiendo las condiciones de precariedad y necesidades acuciantes a los que se deben enfrentarse los indígenas.

El COVID-19 y el panorama epidemiológico vinculado a pueblos indígenas

Al 20 abril, son 328 casos positivos en personas indígenas, de las cuales 30 han muerto, es decir, casi el 10% del total de infectados de diversos pueblos originarios. El 36% de los casos confirmados corresponde al grupo de edad de 20 a 39 años.

La Dirección de Vigilancia Sanitaria de la Salud señala con relación a pueblos indígenas, que los departamentos con mayor número de casos confirmados por COVID-19 son los departamentos que tienen fronteras como el caso de Boquerón, Alto Paraná y Alto Paraguay. En Boquerón 36 % de contagios, en Alto Paraná 19 % y en Alto Paraguay 13 %. Existe una preocupación por el aumento de casos en el chaco y en Alto Paraguay.

Comunidades indígenas en zonas limítrofes con el Brasil y la salud en el contexto COVID-19.

El Paraguay limita geográficamente con tres países: Brasil, Argentina y Bolivia, sin embargo, los informes sobre contagios de coronavirus ubican al Brasil como el país más afectado por la pandemia en la región sudamericana. Si bien es cierto que el limite con el Brasil afecta a cinco departamentos del país: Alto Paraná, Canindeyú, Amambay, Concepción y Alto Paraguay, y que en todos ellos viven pueblos indígenas, en este artículo nos centramos en dos pueblos fronterizos con el Brasil, ellos son el pueblo ayoreo ubicados en el departamento de Alto Paraguay y los Pa’ĩ tavyterã en el departamento de Amambay.

Ambos pueblos indígenas, tanto el Ayoreo y el Pa’ĩ tavyterã, son pueblos originarios transfronterizos, es decir, pueblos cuyos territorios ancestrales están divididos por las fronteras entre países. En el caso del pueblo Ayoreo su territorio ancestral abarcaba lo que hoy es el Paraguay y Bolivia y en el caso del pueblo Pa’ĩ tavyterã su territorio ancestral abarcaba parte de lo que hoy es Paraguay y parte del Brasil.

Las comunidades ayoreas en Alto Paraguay: La discriminación se intensifica con la llegada del COVID-19.

“Parece que nosotros antes que llegará el covid ya lo teníamos, los médicos no indígenas ya nos temían antes y ahora con mayor razón”

La localidad de Carmelo Peralta se ubica en el departamento de Alto Paraguay, delante de la localidad fronteriza de Porto Murtinho del lado Brasilero. En este distrito se encuentran ocho comunidades del pueblo ayoreo, ellas son Guida Ichai, Isla Alta, Cucaani, Nueva Esperanza, Punta, Tiogai, Atapi, Punta Euei. En esta zona viven cerca de 800 personas pertenecientes a este pueblo. Los ayoreos son de la familia lingüística Zamuco, su idioma nativo es el ayoreo, mientras que su idioma de intercambio es principalmente el español.

Alto Paraguay se ubica en los últimos meses de abril como uno de los que registra mayor número de contagios de COVID-19 entre los pueblos indígenas, los últimos datos del Ministerio de Salud señalan que ya poseen 30 contagiados, 17 varones y 13 mujeres.

Este departamento fronterizo con el Brasil, es uno de los más abandonados por el Estado paraguayo, en especial en cuanto a servicios de salud pública. Los pobladores de la zona, incluyendo a los indígenas ayoreos, deben pasar a la ciudad de Porto Murtinho o esperar la embarcación de la Lancha Aquidabán para llegar hasta la ciudad de Concepción tras varios días de viaje y llegar a otras ciudades para recibir asistencia médica.

El año pasado una señora perdió su bebe por falta asistencia de salud, no se pudo salvar a la criatura porque no tuvo asistencia necesaria, siempre decimos que no hay condiciones de atención a la salud acá, si nos enfermamos grave nos derivan a Pedro Juan Caballero a través de Puerto Mortiño, o sino en el hospital regional de Concepción. La dotación de medicamentos escasea, hay muchos personales, pero medicamentos faltan, insumos no tenemos en los puestos de salud. (Entrevista N°2: Informante clave, cacique de comunidad– 24/04/2021)

La salud mental, el impacto psicológico en las comunidades ayoreas es un aspecto que aún no está dimensionado por las instituciones públicas de sanidad, el temor que ha generado la pandemia no ha sido abordada y representa un gran desafío tanto en poblaciones indígenas como no indígenas.

A comienzos de la pandemia vimos las noticias divulgadas a través de internet y las redes sociales, fue doloroso, porque nunca habíamos visto algo así, la población ayoreo nunca había pasado por esto, ver personas que morían, eso produjo mucho miedo por los contagios. (Entrevista N°1: Informante clave docente de la zona– 24/04/2021)

Llegó y nos afectó, todo el pueblo fue afectado psicológicamente, pero acá en Carmelo, ya que es frontera con Brasil, con Puerto Murtinho, fue aún más. Ese año, 2020, pasamos con temor, nunca vimos nada parecido en internet, fue un gran choque también psicológicamente. (Entrevista N°2: Informante clave, cacique de comunidad– 24/04/2021)

La población los indígenas ayorea se sintió más discriminada con la llegada de la pandemia por parte de personal de blanco no indígena. Si bien antes del COVID-19 la atención ya era difícil, con el virus en circulación, los indígenas ayoreos por sus costumbres de compartir utensilios y otros, así como el desconocimiento de su cultura e idioma fueron vistos como riesgosos.

En marzo hubo temor del virus, ya en ese momento escuchamos que hubo discriminación hacia los indígenas, siempre hubo discriminación hacia nosotros como indígenas, como líderes recibimos noticias que a la gente de blanco (médicos, enfermeros) nos rechazaba, que no quería atender a los ayoreos que iban con tos, con resfríos, yo digo que es una pena que haya discriminación hacia nosotros de un porcentaje de gente de blanco, hay un desprecio hacia nosotros. (Entrevista N°2: Informante clave, cacique de comunidad– 24/04/2021)

Siempre hemos vivido así, pero con este tema de covid-19, el año pasado desde marzo nos duele escuchar no me atendió bien uno de blanco, nos duele que no se le atendió a nuestra gente, pero no es algo nuevo, siempre pasamos por eso. (Entrevista N°2: Informante clave, cacique de comunidad– 24/04/2021)

La falta de información con pertinencia cultural desde las instituciones públicas de salud provocó el descreimiento en los ayoreos sobre el COVID-19, exponiéndolos al contagio y las consecuencias de la enfermedad. Las comunidades no han cambiado sus hábitos de compartir colectivo a pesar de los protocolos, esto devela que se necesita impulsar campañas de concienciación y sensibilización acordes a sus culturas y en sus idiomas.

Una persona tenía tos y gripe, volvió a la comunidad, le hicieron el hisopado y dio positivo, sin embargo, el enfermero ayoreo también siempre estuvo con ella en contacto directo, porque nosotros entre ayoreos no nos tenemos miedo y no le paso nada a ese enfermero y a la enfermera que era su hermana, y era raro que no se contagiaron. Esta situación hizo descreer en la enfermedad y bajar las guardias, luego muchos se contagiaron, porque vos sabés que los ayoreos no hacemos distancia, ni usamos tapabocas, lavado, nada de eso en nuestras comunidades, nosotros compartimos el terere, no tenemos cuidado de los que se esta hablando en forma nacional. El consumo de terere, se comparte entre varias personas hasta ahora, eso no ha cambiado. (Entrevista N°1: Informante clave docente de la zona– 24/04/2021)

Los casos positivos en indígenas ayoreos provocó no sólo la discriminación del personal de salud no indígena sino también de pequeños comerciantes de la zona, quienes comenzaron a temer de los indígenas.

 Muchas personas ayoreas no creyeron el año pasado y dieron positivo, luego algunos paraguayos ya no quisieron recibir a los ayoreos en sus pequeños comercios y así fue, la gente de blanco no querían recibir a los ayoreos, eso dijeron los propios promotores de salud que son ayoreos. . (Entrevista N°1: Informante clave docente de la zona– 24/04/2021)

Los indígenas no se han quedado aislados, siguen saliendo a trabajar. A pesar de que dieron positivo al COVID-19 varios indígenas, ante la nula asistencia del estatal para permanecer en sus comunidades y realizar un aislamiento que impida la propagación del virus, los ayoreos continúan con sus diversas actividades laborales. Algunos trabajan en la construcción de la ruta bioceánica, otros como peones en estancias de la zona, en la pesca y la recolección de carnada viva, etc.

No podemos hacer nada, pero a pesar de los casos positivos seguimos trabajando, se sigue trabajando en la ruta bioceánica, otros en las estancias, otros en la pesca, recolección de carnada viva, otros en la recolección para la artesanía, otros en la chacra, otros en recolección de miel, otros que trabajan en la busca de alimentos de la selva como carne de chancho y otros. No hay preocupación porque la gente debe trabajar para comer. (Entrevista N°2: Informante clave, cacique de comunidad– 24/04/2021)

Para los ayoreos nada ha cambiado, la vida sigue su ritmo en la zona, observan y escuchan lo que pasa en capital con relación al covid-19, pero ante la ausencia de una campaña de concienciación con pertinencia cultural por parte del Ministerio de Salud, los pobladores no siguen las medidas de sanidad para evitar el contagio y la propagación del virus. Ellos esperan que existan capacitaciones e información que llegue a sus comunidades.

Escuchamos lo que se dice que pasa en la capital, pero seguimos trabajando. En Carmelo mínimamente la gente usa cuidados obligatorios de lo que es sanidad, para este tipo de enfermedad, desde el comienzo hasta ahora. No hay distanciamiento, ni se levan las manos. (Entrevista N°1: Informante clave, docente de la zona– 24/04/2021

A pesar de contar con una ley de salud indígena, el desafío de un abordaje intercultural es una pendiente, el personal de salud teme a los indígenas ayoreos al no comprender sus costumbres y modos de vida.

 Nos falta que los médicos de la zona expliquen más sobre el covid a las comunidades indígenas, pero ellos también tienen miedo de nosotros, quizás porque no entienden nuestro idioma, parece que nosotros antes que llegará el covid ya lo teníamos, los médicos no indígenas ya nos temían antes y ahora con mayor razón. Como si tuviéramos esta enfermedad.

Los ayoreos solicitan mayor información y capacitación en sus comunidades por parte del personal de salud de la zona, médicos y enfermeros. Reclaman ser mejor informados sobre la enfermedad, sus consecuencias y modos de prevención, indican que ya saben algo al respecto pero aspiraran a que los profesionales de salud se acerquen a sus comunidades.

 Ellos deben explicar delante de la población ayorea, aunque ya sabemos, pero sería bueno. (Entrevista N°1: Informante clave, docente de la zona– 24/04/2021)

Los funcionarios de salud van esporádicamente a las comunidades, pero sólo con el propósito de informar y subir fotos en las redes sociales. Para estas ocasiones el líder de la comunidad se coloca el tapabocas y muestra el alcohol en gel para la publicación, sin embargo, el propio líder reflexiona de que no debe ser así tal situación, sino que los profesionales médicos y enfermeras deben capacitar a los indígenas para que puedan protegerse del contagio.

Tenemos Unidad de Salud Familiar (USF), ellos pasan de vez en cuando por la comunidad, para que ellos informen a sus autoridades que pasaron por aquí. Para que yo pueda aparecer en las redes debo ponerse el tapabocas y el alcohol en gel sobre mi mesita y ellos puedan divulgar, pero no debe ser así las cosas. (Entrevista N°2: Informante clave, cacique de comunidad– 24/04/2021)

Las comunidades indígenas Pa’ĩ tavyterã en Amambay: Sus Ñembo’e (rezos y cantos) y sus hierbas medicinales han sido hasta el momento su principal medicina ante el covid.

 Los Pa’ĩ tavyterã tienen 57 comunidades dentro del departamento de Amambay, según lo señala el último censo nacional indígena del 2012, son alrededor de 15.494 personas. Las 57 comunidades se encuentran distribuidas en las localidades de Pedro Juan Caballero, Capitán Bado, Bella Vista, todas fronterizas con el Brasil.

El pueblo Pa’i Tavytera, representa una riqueza invaluable para la diversidad del Paraguay, ellos guardan celosamente desde hace cientos de años un rico legado cultural y espiritual a través de sus tekoaruvicha y Jari (abuelos y abuelas sabias y sabios). Junto con los Kaiowá del lado Brasileño, forman parte de la hoy conocida gran Nación Guaraní, así como los pueblos Mbya, Aché, Avá, Ñandéva, y los pueblos guaraní de la cuenca del Chaco.

Las comunidades del pueblo Pa’i Tavytera en Amambay recurren principalmente hasta la ciudad de Pedro Juan Caballero cuando necesitan una asistencia sanitaria, en esta ciudad están el Hospital Regional de Pedro Juan Caballero y el Hospital Juan Pablo II.

Cuando se enferman de algo más grave, nosotros enviamos al puesto de salud más cercano, en el caso de Bella Villa Norte les enviamos ahí y si no encuentran solución en este lugar se deriva hasta el Hospital Regional en Pedro Juan Caballero. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

Ante la ausencia de asistencia de los responsables institucionales de la salud, los Paĩ se resguardan en sus creencias, a través de sus ritos ceremoniales, sus rezos y cantos para evitar que la enfermedad ingrese hasta sus casas, fortaleciendo sus sistemas inmunológicos con la infusiones de hierbas cuyas propiedades curativas solo ellos lo conocen.

Nosotros cuando comenzó la pandemia solo nos manejamos con nuestros rezos, nuestros cantos y con nuestras hierbas medicinales, no nos cerramos por la atención de los hospitales. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

Las comunidades indígenas Paĩ indican que también solo en una ocasión, al inicio de la cuarentena en marzo del 2020 han recibido asistencia alimentaria por parte del Estado, posteriormente tuvieron que salir a buscar las diversas maneras para lograr el sustento diario, aunque eso los exponga al contagio.

Solamente una vez recibimos ayuda del Estado, en los inicios de la pandemia en el 2020, recibimos ayuda de alimentos por parte del INDI, casi todas las comunidades Pa’i, pero solamente una vez. Luego tuvimos que buscar formas de sostenernos nosotros dentro de nuestras comunidades. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

Al igual que los ayoreos, también mencionan que tampoco han recibido capacitaciones sobre el COVID-19 para una mejor prevención o manejo interno dentro de sus comunidades. Como en la mayoría de las comunidades del país son reacios al uso de tapabocas y solo lo utilizan cuando deben salir fuera de la comunidad hacia centro urbanos.

No tuvimos capacitaciones de ningún lado, en ninguna parte, Si vamos a salir fuera de la comunidad entonces usamos tapabocas. Pero en las comunidades, en nuestros tekoha no usamos, ahí rezamos y usamos nuestros remedios propios. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

Los indígenas Paĩ cuando salen hacia los centro urbanos toman los cuidados correspondientes del uso de tapabocas, sin embargo, al interior de sus comunidades no suelen utilizar tapabocas ni tienen reparos para compartir terere juntos o espacios comunes.

Si vamos a la ciudad vamos con tapaboca y nos cuidamos, pero dentro de las comunidades no usamos. Y si necesitamos, pedimos que los doctores nos visiten en nuestra propias comunidades. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

Un dato importante, de modo comparativo, es que los indígenas Paĩ hasta el momento no cuentan con un elevado numero de contagios, a diferencia de las comunidades ayoreas y la zona de Alto Paraguay.

Nosotros como Pa’i, no tuvimos hasta ahora internados, ni casos positivos. Hubo un caso que fue registrado, pero según nosotros no lo fue, porque ahora los médicos blancos a todo le pone como diagnóstico de covid positivo, nosotros vemos que solo hacen valer eso. Nosotros nos cuidamos entre nosotros, sabemos cómo medicarnos. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

En las comunidades Paĩ se cuentan con promotores de salud, sin embargo, no tienen rubros ni recursos para llevar adelante sus labores, lo que dificulta una asistencia efectiva, en muchos casos los propios promotores deben trabajar fuera de sus comunidades ausentándose ante casos de necesidad de atención.

No tenemos esperanza con el Ministerio de Salud, nosotros hacemos muchos trabajos dentro de la comunidad, asistimos los casos de primeros auxilios, pero no tenemos rubros, somos promotores de salud pero no percibimos nada del Ministerio. (Entrevista N°3: Informante clave, promotor de salud indígena– 23/04/2021)

CONSIDERACIONES FINALES

Antes de la pandemia las comunidades indígenas ya experimentaban tasas muy altas de riesgo para su salud y necesidades acuciantes. Hoy, en plena lucha contra el COVID-19, su realidades presentan una particularidad cultural, así como una vulnerabilidad mayor que no hay que pasar por alto a la hora de implementar medidas preventivas y tratamientos sanitarios.

Tanto las comunidades ayoreas como las Paĩ Tavytera precisan mejorar sus condiciones de salud y mucho más en el contexto del COVID-19, es por ello que una de las organizaciones indígenas nacionales en Paraguay, la Federación por la Autodeterminación de Pueblos indígenas (FAPI) solicita al gobierno fortalecer el sistema de salud pública de las regiones donde se encuentran las comunidades indígenas afectas y dotarlas de implementos de protección y prevención de contagios (tapabocas, jabón, alcohol en gel, termómetros, etc)

Sin dudas, las barreras culturales plantean el reto más complejo, ya que hay poca comprensión de los factores sociales y culturales que influyen en las actitudes y las prácticas relacionadas con la salud de los pueblos indígenas. El sesgo de la medicina e intervención occidental puede ser inapropiado para lograr buenos resultados frente a la pandemia en comunidades indígenas.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

  • Comunidades indígenas en doble emergencia. Disponible en : https://www.cdia.org.py/2020/08/19/comunidades-indigenas-en-doble-emergencia/

https://experience.arcgis.com/experience/2a1e7ad30b3549d18b298f51f911b524

 

 

 

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